sábado, 3 de noviembre de 2007

31.- LUZ

¿En esos ojos se refleja la figura de Luz?

Capítulo 31: El regreso
En la más completa oscuridad, la noche anterior al escape de Rayo, un barco había arribado a la orilla del río. Garras Prometeo saltó a tierra, sin tocar las profundas aguas, y se perdió en la oscuridad.
Más de una hora después regresó, cayó en la cubierta como el rocío nocturno. Al cruzar la mirada con su Maestro, sin palabras le hizo entender:
-Está despejado, sigue siendo peligroso.
Esperando, Luz repasaba en su memoria el mapa de la zona; sus abuelos conocen la topografía del sitio y le transmitieron los detalles. En la espalda de la joven, un pesado morral, luce como una grotesca joroba.
Levantó la mirada por enésima vez, las estrellas son su fuente de orientación, ubicó los cerros en la lejanía, allí estaba su objetivo. La maleza le obstruía la visión sobre la llanura y sus maizales; a pesar de eso, se sintió orientada, su confianza aumentó.
Algún ruido la sobresaltó, sin moverse, pensó:
-Pirañas, encontraron un pez herido, lo están devorando.
Un rumor suave, invadió el ambiente. Era uno de los inmensos monstruos voladores, a estas horas rondan la llanura. En la orilla opuesta se oyó el canto del gallo.
Maestro y alumno asintieron, miraron a Luz; la joven, de una única y silenciosa carrera, saltó desde la borda. Hizo un arco perfecto sobre la superficie del agua, cayó en tierra y se sumergió en la espesura.

No hay comentarios: